"El objetivo fundamental del Kajukenbo es hacernos sobrevivir a una agresión en la calle, el resto no tiene ninguna importancia"

viernes, 8 de enero de 2016

Entrevista a GM Allen Abad

 Entrevista publicada en la revista Cinturón Negro, enero 1994

GM Allen Abad. 9º dan Kajukenbo
(1950-2009)
  Háblanos de tus comienzos

  Empecé a entrenar Judo con Walter Iona, en mi pueblo natal Makaha Beach, en Honolulu (Hawai), cuando tenia nueve años. Algunos de mis amigos me dijeron: “vamos a entrenar Karate”, y yo dije: “Karate?”. “Si, Kajukenbo”, respondieron. En  aquel tiempo yo era joven, así que creo que empecé a estudiar Kajukenbo a los doce años.
  Fui con mis amigos aun sitio llamado YMCA, era una asociación de jóvenes católicos donde enseñaba el instructor Ernest Rodríguez. Era cinturón marrón-negro y en aquel entonces tenia muchos estudiantes. Llevábamos un kimono blanco y el Instructor Jefe en aquel tiempo era Marino Tiwanak. Por entonces mi instructor era Larry Kewaauhau. Era cinturón marrón de Ernest Rodríguez y continuó su entrenamiento hasta recibir su cinturón negro de manos de Marino Tiwanak. Entonces yo tendría quince o dieciséis años y empecé a entrenar en una escuela que abrió el mismo Marino Tiwanak en la YMCA.
  Por aquel entonces yo era joven y no permanecía mucho tiempo en el mismo sitio. Hacíamos mucho “surf” allí en Hawai. Al crecer decidí seguir entrenando seriamente pero cumplí diecinueve años y tuve que hacer el servicio militar. Me marché a Seattle donde conocí a una persona de origen japonés, pero nacida en Hawai, se llamaba Frank Kim. Hacía Kenpo-Karate pero tenía los mismos movimientos básicos que el Kajukenbo. Entrené con él, en Seattle, durante tres años. Después, volví a Hawai a finales de 1970.
  En 1971 volví a entrenar con mis amigos en mi primera escuela. No había muchos cinturones negros en aquella época.
  A principios de 1972 me marché de Hawai para instalarme en San Diego, allí conocí a algunos amigos y continué entrenando. Aunque era cinturón marrón empecé a dar clases. Más tarde, Sijo Emperado vino a San Diego y asistió a mis clases, que por entonces era poco numerosa, y me promovió a cinturón negro. Así que recibí oficialmente mi cinturón negro de manos del Profesor Emperado. Y desde entonces y hasta ahora he continuado enseñando en San Diego bajo la tutela de Sijo Emperado, siempre intentando hacerlo lo mejor posible.

  ¿Que sistemas has practicado además del Kajukenbo?

  Primero Judo Kodokan y luego Kajukenbo. Mis primeros conocimientos básicos de Kung Fu, algunas posiciones y desplazamientos los aprendí de Sifu Jimmy Ibrau. Cuando empecé a estudiar Whu Shu tenía veintiún años y era demasiado mayor para dar aquellos saltos, así que no profundicé demasiado en este sistema, aunque pasé mucho tiempo observando su forma de entrenar. Tienen muy buenos fundamentos, velocidad de movimientos y mucha flexibilidad, así que intenté dar esas características a mis estudiantes. El mismo Emperado aprendió Whu Shu, así como Sigung Gary Forbach.

  ¿Que fue lo que mas te gusto del Kajukenbo?

  Cuando era joven, la disciplina. Cada estudiante sabía que debía tener un gran respeto al Instructor y que no podía abusar del Kajukenbo. Cuando entrenábamos, mirábamos a los Instructores, a los cinturones negros, y era difícil que dudáramos de ellos. Sabíamos que era realmente duro convertirse en cinturón negro, asi que los estudiantes sentíamos un gran respeto hacia ellos. Nosotros crecimos creyendo en esto. Entrabas a formar parte de la elite cuando recibías el cinturón negro. No les cuestionábamos, no intentabas menospreciar a los cinturones negros de Hawai porque sabías que eran hombres que realmente merecían el cinturón negro. Veías que cuando lo recibían eran realmente felices, algunos incluso lloraban porque habían tenido que entrenar durante mucho tiempo.
  Cuando conocí la escuela de Marino Tiwanak me impresionó su velocidad. Era muy rápido y eso abrió mis ojos.  Me dije a mi mismo: “así es como un hawaiano quiere ser, como Marino Tiwanak”. Entonces conocí a otro hombre llamado Sid Ansunción, y cuando vi sus clases me di cuenta de que era terrorífico por su forma de moverse. ¡Sus técnicas de defensa personal eran reales! El enseñaba las técnicas básicas. Estuve practicando casi un año solo tres técnicas de defensa contra agarre, perfeccionándolas una y otra vez sin hacer nada mas. Cuando practicas las formas y los movimientos básicos del Kajukenbo, el Instructor te dice que los practiques y que los estudies, que no es suficiente con que lo hagas una y otra vez. Y esto es lo que he estado haciendo.
  Algunas veces me pelee en la calle cuando era joven, y perdí. Eso me sorprendió y me dije a mi mismo: “todo esto no me ha ayudado, algo va mal”. Mis amigos también fueron heridos en algunas de sus peleas. Hasta este momento hemos seguido entrenando para ser capaces de enfrentarnos a una situación real. Entrenamos pensando como puede golpearte una persona en la calle. Como nos ha enseñado el profesor Emperado, sabemos que el sistema Kajukenbo es un estilo de lucha en la calle. Y se necesita tiempo para aprender a luchar en la calle, todo el mundo lo necesita. Practicar y estudiar son los objetivos de todos los artistas marciales que practican Kajukenbo.

GM Allen Abad
  ¿Qué cambios has visto en el Kajukenbo de los últimos años?

  Actualmente el Kajukenbo es más creativo. Tenemos mas formas, trabajo con armas y eso esta bien, es por donde el Kajukenbo tiene que ir. Todo el mundo está estudiando el manejo de armas para incorporarlo a su entrenamiento. Escrima, bastón, armas de Okinawa, así como formas de Kung Fu. Todo esto es muy bueno para los Instructores y Cinturones Negros. Ellos saben que necesitan tiempo y paciencia para conseguir que el Kajukenbo sea más fuerte.

  ¿Qué significa para ti el Kajukenbo?

  Es mi vida. Para mi ha sido algo fantástico que el profesor Emperado creara este Arte. El quiere verlo crecer y hacerse mas fuerte, no solamente como forma de pelear, sino como organización. Creo que el quiere que los Instructores que representan el Kajukenbo  formen una organización eficiente y sean buenos dirigentes. El Kajukenbo se ha extendido por algunos países, entre ellos España, y todos debemos esforzarnos para que el estilo crezca.
El profesor Emperado ha conseguido que su Arte se extienda por todo el mundo. El nos dio los fundamentos y nosotros tenemos que estudiar, practicar y perfeccionarnos.

(…)

  ¿Qué diferencias has notado entre el Kajukenbo español y el americano?

  Es lo mismo, no hay diferencias. Si hubiera diferencias algo estaría mal. Ahora bien, como muchos otros cinturones negros, hemos aprendido otros estilos y los hemos introducido en el Kajukenbo, cosa que esta bien, lo que puede hacer que parezca que hay diferencias. Pero tenemos el mismo tipo de mentalidad.

  ¿Cuáles son tus objetivos en el futuro?

  Mis objetivos son ver crecer a mis Cinturones Negros y a mis estudiantes, y ayudarles a ser mejores en la vida. Quiero visitar sus escuelas, animarles y ayudarles a mejorar. Me gustaría ser como un padre para ellos (…)

En esta entrevista se han omitido voluntariamente algunos comentarios por considerar que no aportan nada importante a la situación actual del Kajukenbo.